domingo, 28 de septiembre de 2014

ESTÁ LA TARDE PROPIA..., de Mariví Verdú

Sobre el cielo nublado
se oculta el sol…
está la tarde propia
para el amor.


Va cayendo la lluvia
tras los cristales…
para el amor se ha puesto,
propia, la tarde.


Ya descampó y el cielo
vuelve a ser gloria…
para el amor se ha puesto,
la tarde, propia.


El campo está de oro,
la mar, en calma…
para amar están propias
nuestras dos almas.